viernes, 16 de mayo de 2014

Ecuador, ¿La vigésima cuarta provincia china? (Primera parte)





"Con profunda tristeza, pero también con absoluta responsabilidad con nuestro pueblo y con la historia, he tenido que tomar una de las decisiones más difíciles de todo mi gobierno..."

Es así como el presidente de la República del Ecuador, Rafael Correa, anunciaba la explotación del bloque ITT en la selva ecuatoriana. Decisión sumida en la polémica tanto nacional como internacional. 

El parque nacional Yasuní, ubicado entre las provincias de Orellana y Pastaza, se extiende en un aérea de 9 820 kilómetros cuadrados y es considerado como una de las zonas más biodiversas del planeta. En él se encuentran los pozos de exploración petrolera Ishpingo, Tambococha y Tipuniti, mejor conocidos como el bloque ITT que supondría ingresos por más de 600 millones de dólares anuales durante los próximos 30 años. Según fuentes oficiales la explotación de crudo en la zona no solo provocaría un serio daño a la fauna y flora del parque, sino pondría en riesgo a varios pueblos en aislamiento voluntario o no contactados. 
A demás durante las últimas semanas se han escuchado reiteradas denuncias de fraude en el proceso de recolección de firmas con el fin de una convocatoria a Consulta Popular. El grupo ambientalista Yasunidos, quien se encargó de presentar 727 947 firmas al Consejo Nacional Electoral (CNE), hizo lo que muchos pensaron imposible al recolectar más del numero de firmas necesarias para el proceso y movilizar a reconocidas estrellas del ámbito internacional. Sin embargo el CNE invalido más del 40% de los formularios presentados dejando al lado la posibilidad de una consulta ciudadana respecto a la explotación pretolífera.

Pero miremos las cosas con otro enfoque. El petróleo es sin duda alguna la base de la economía ecuatoriana. Por lo tanto este recurso es el bien más preciado que tenemos  todos los ecuatorianos, tanto así, que sacrificaremos parte de nuestros animales, insectos, selva e incluso pondremos en riesgo a seres humanos que no decidieron pertenecer a esta sociedad "civilizada" por extraerlo. También tras las gravísimas denuncias de fraude en un proceso constitucional se ponen en juego los inviolables derechos democráticos de cada una de las personas en el Ecuador. Cabe recordar, por obvio que sea, esas personas son nuestras familias, amigos y conocidos. La pregunta de si en verdad vale la pena sacrificar todo esto es muy personal y necesita un grado de información muy alto para tomar una decisión. 

Ahora que hemos ampliado este enfoque y conocemos la importancia del crudo para los ecuatorianos, hay que preguntarse cómo se maneja nuestro preciado bien. Y es de mi agrado plantear la siguiente pregunta: ¿En verdad sabemos si esta bien manejado, de la mejor y más eficiente manera, el limitado recurso que nos pertenece a todos? 

A continuación les dejo un link que va a responder esta duda en detalle.   



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